Conoce por qué en muchas casos grandes emprendimientos terminan por no continuar.

Por: Enrique Santa Cruz. Docente y consultor senior del Instituto de Regulación y Finanzas (FRI) de ESAN en temas de Fusiones y Adquisiciones, Project Finance, APPs y Endeudamiento Estructurado y Evaluación de Riesgos para el sector público y privado

A junio de 2025 el reporte Demografía Empresarial en el Perú señala que se crearon o reactivaron poco más de 88 mil empresas y se dieron de baja otras 58 mil empresas. Esta es una dinámica que se presenta en el país con periodos de saldos positivos y otros con saldos negativos. Startupblink nos ubica en el 6to lugar en la región latinoamericana en cuanto al ecosistema de startups. Ciertamente el emprendimiento es parte del ADN peruano, sin embargo, enfrenta una serie de desafíos tanto de su propia gestión como en su entorno.

A continuación, se presentan cinco desafíos que al no resolverse oportunamente conllevan a la no continuidad del emprendimiento:

· En muchas ocasiones las ideas de negocio parten de imitar algo que parece estar de moda, más aún en los tiempos de las redes sociales. Un negocio debe como punto de partida, comprobar si hay un mercado para nuestros productos o servicios. Esto se puede resolver aplicando pruebas piloto o haciendo encuestas en nuestro entorno más cercano para luego pasar a comprometer más inversión.

· Debemos organizar el movimiento de dinero que requiere nuestro negocio y separarlo de nuestras obligaciones familiares o personales. La ausencia de un control financiero es una causa silenciosa de la quiebra de un emprendimiento. No hace falta tener soluciones sofisticadas, pero si mucho orden. Un registro sencillo de ingresos y gastos con los destinos definidos ayuda mucho.

· Descuidar lo que el cliente nos dice. Es una tarea permanente estar atentos a lo que nuestros clientes comentan, sugieren o inclusive de aquello de lo que se quejan. Hay

que ver oportunidades en todos estos aspectos. Se debe procurar tener canales abiertos para comentarios y responder rápido.

· Contar con un apoyo adecuado. Muchas veces el emprendedor es bueno haciendo el producto o dando el servicio, pero requiere de soporte. Nuestras habilidades y tiempos no pueden abarcar todo. Se requiere un equipo, quizás pequeño al inicio, pero será de mucha ayuda.

· Capacitarse. El emprendedor debe buscar capacitarse en técnicas de ventas y en como identificar tendencias. No prepararse para un entorno cambiante y en evolución puede golpear y es preferible saber cómo responder. En estos casos también ayuda mantenerse informado, buscar diversificar las fuentes ingresos y emplear la capacitación para la toma de decisiones.

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